La vida marina en el arrecife

Durante estos días de cuarentena, debido al estado de alarma, en los que hemos estado confinados en casa y hemos tenido que dejar de hacer nuestras actividades habituales, la naturaleza lo ha notado. Seguramente habéis recibido numerosos videos y fotografías en los que se ven cabras, corzos, jabalíes…  tomando las calles. Eso no solo ocurre en las calles, también ocurre en el mar.

Hace poco se vio una ballena entrando en el Abra y esta última semana mismo hemos tenido el placer de ver unos delfines en la bahía de Plentzia y pasando justo por encima de nuestra bodega submarina. Todos los años recibimos su visita, pero este año, se acercan más a la costa y han permanecido más tiempo.

Todo ello nos hace pensar en cómo estará de exuberante la vida marina en nuestro arrecife, ya que es una época de pausa y recuperación para la naturaleza. Es verdad que la naturaleza necesita mucho más tiempo para recuperarse de la presión que los humanos ejercemos sobre ella, aun así, poco a poco, se está viendo como los animales y las plantas han agradecido este descanso.

Como muchos ya sabéis, nuestra bodega no es solo una bodega submarina sino también es un arrecife artificial diseñado para poder ayudar a la recuperación de la vida marina en la zona. Estamos orgullosos de ser la primera bodega arrecife artificial del mundo. La bodega, está ubicada en una zona muy azotada por las mareas con un fondo de arena que se va alternando con losas de piedra cada pocos meses. De esta manera la bodega se ha convertido en un refugio para muchos animales y actúa como una micro área marina protegida.

A lo largo de estos diez años hemos observando la evolución del estado del ecosistema y de las diferentes especies de fauna y flora que lo forman. En pocos años, más de 100 especies buscaron cobijo en ellas y cada año se ha ido incrementando el número especies hasta su máxima capacidad.  A día de hoy, sabemos que es un ecosistema estable, complejo y diverso que cuenta con especies propias de la zona, tal como debe ser.

Dentro de nuestro equipo humano, contamos con buceadores y con una bióloga marina, Anna Riera, con la colaboración del Dr. Marc Terradas, que llevan a cabo la vigilancia periódica de la bodega-arrecife para evaluar la biodiversidad y el estado del ecosistema, realizando un estudio anual sobre el estado de la vida marina, en paralelo a la producción de bebidas bajo estrictos controles de calidad.

Estamos impacientes por poder sumergirnos y ver en persona como se encuentra nuestra bodega- arrecife, observar todo su esplendor natural: los peces nadando tranquilamente, las algas, los cangrejos, las quisquillas, los cabrachos y pulpos camuflados y atentos ante cualquier movimiento…ajenos a todo lo que ha sucedido en ese mundo que llamamos “real”. Y junto a ellos, algunos de nuestros vinos, que tras pasar el invierno, esperan el momento de su extracción del fondo de la bahía de Plentzia.

Seguramente tras este período de inactividad, será como adentrarse en una especie de selva subacuática…en oscuridad, silencio y movimiento… cuando nos sumerjamos, os lo contaremos.